Hábitos alimenticios cardiosaludables para prevenir enfermedades

La alimentación es la clave para la salud y para controlar el peso en ese orden de ideas, optar por productos como los de Herbalife, es un muy buen primer paso por dar, ya que se está considerando todo el prestigio y experiencia de una compañía reconocida a nivel mundial.


Ahora bien, en este caso nos concentramos en los hábitos dietéticos que son cardiosaludables, en otras palabras, en esas estrategias a nivel nutricional y alimenticio que tienen como efecto en el organismo la promoción de la salud del corazón. Además, la ventaja principal de este tipo de metodologías, es que al tiempo que la salud de la persona mejora, se puede controlar el peso.

Vale la pena resaltar que para la sociedad contemporánea, las enfermedades del corazón una de las razones principales de muerte. Puede ser que con el tiempo la cirugía y la medicina han conseguido avanzar de una manera considerable, lo cual, por supuesto implica que se salven muchas vidas día a día, pero la mejor estrategia siempre es la prevención. Teniendo en cuenta lo anterior, lo que más conviene es que se conozcan hábitos alimenticios cardiosaludables.

Finalmente, los hábitos dietéticos cardiosaludables no son más que una serie de recomendaciones o de estrategias nutricionales a través de las cuales las personas consiguen cuidar de la salud de su corazón mediante la incorporación de ciertos cambios en su alimentación. Por supuesto, siempre es válido y necesario que se complemente con otro tipo de hábitos como por ejemplo el ejercicio regular.

¿Qué son los hábitos alimenticios cardiosaludables?

En un primer momento hay que mencionar sobre los hábitos dietéticos cardiosaludables, que estas son estrategias que consiste en aprender a tomar buenas elecciones alimentarias para la promoción de la salud cardiaca. Al respecto, hay investigaciones a nivel científico que destacan la manera en que las dietas de tipo occidental terminan por incidir en un nivel más alto de inflamación, lo que implica un riesgo más alto de una enfermedad cardiovascular.

Por otro lado, las observaciones de los expertos también apuntan a otros modelos de alimentación, como el de la dieta mediterránea y la dieta DASH, ya que pueden significar un efecto beneficioso. Sabiendo lo anterior, se comparten una serie de hábitos dietéticos básicos para que se pueda promover el bienestar en el corazón.

Mantener un peso saludable

Entre las condiciones que implican un mayor riesgo para el corazón, la obesidad ocupa un lugar importante. Cuando se tiene un peso corporal y un porcentaje de grasa que está por encima de lo normal, todo esto conlleva a que se dé un riesgo muy grave para el desarrollo de enfermedades del corazón. De esta manera, es fundamental entonces que se busque el aseguramiento del mantenimiento de una dieta normocalórica cuando el peso actual no es el más adecuado.

Por otro lado, si se sufre de sobrepeso, la idea principal es que se cumpla con un plan dietético hipocalórico con vista a que se retorne a una composición corporal adecuada. Un método que vale la pena tener en cuenta es empezar con un plan de ayunos intermitentes. De este modo, lo que se logra reducir, es la ingesta considerable de calorías en una dieta, sin que exista un esfuerzo gigantesco en el proceso.

La eliminación del desayuno en algunos casos puede ser un hábito positivo por dos razones: en primera instancia, por los mecanismos hormonales, ya que el ayuno va a ocasionar que esto ocurra en las primeras horas del día, al promover la quema de lípidos; en segunda instancia, porque el desayuno se conoce como la principal comida de riesgo, al igual que sucede con el picoteo entre horas, introduciendo muchos casos alimentos azucarados y procesados.

Tener cuidado con el consumo de azúcar

El azúcar es otro de los factores que facilita y precipita las enfermedades del corazón, en particular si hay un caso de diabetes registrado. Aunque no se trata de una enfermedad mortal por sí sola, la realidad nos dice que si conlleva a una serie de complicaciones que están relacionadas con consecuencias fatales. Una de las más importantes es que aumenta la probabilidad que se desarrollen enfermedades cardiovasculares.

Cuando hay un mal control de la glucosa, es factible que esto provenga de una derivación de una sobreingesta crónica de azúcares simples y te un peso corporal que está por arriba de lo adecuado. Si se consume de modo frecuente alimentos procesados, refrescos y azucarados, el riesgo va a ser mucho más alto para que se desarrollen patologías de tipo pancreático.

Vale la pena a su vez mencionar que la diabetes es una enfermedad crónica que no presenta una cura conocía, pese a que se puede tratar para que la sintomatología se minimice. Por lo tanto, siempre hay que optar por una prevención y una concienciación desde las primeras etapas de la vida.

Un consumo adecuado de grasas

La grasa es reconocida por ser un nutriente con el que se protege el sistema cardiovascular por excelencia. Si existe un consumo adecuado de las grasas mono y poliinsaturadas se va a poder garantizar una regulación del perfil lipídico y los triglicéridos en la sangre, para que así se reduzca el riesgo de complicaciones.

Teniendo en cuenta lo anterior, en el plan de alimentación es importante que se incorporen de modo frecuente grasas saludables como el pescado azul, los frutos secos, el aceite de oliva y el aguacate. Ahora bien, las observaciones también nos indican que estos alimentos se deben consumir con cierta moderación, pues las grasas son un nutriente muy energético y cuando hay un descontrol esto puede significar un incremento en el peso derivado de una dieta hipercalórica.

Por otro lado, no todas las grasas son positivas para el cuerpo. Durante los años más recientes, las grasas saturadas se han puesto en cuestión, respecto a si son tan nocivas como se creía tiempo atrás. De todos modos, lo que se conoce a ciencia cierta es que la reducción al máximo el consumo de grasas trans es lo más adecuado para la salud y prevención de enfermedades.

Finalmente, tenga presente que este tipo de grasa son un resultado de freír aceites vegetales a una temperatura alta y están presentes de un modo muy amplio en la industria. En conclusión, como un hábito saludable es que se use una plancha, el método principal de cocción.

No olvidar los antioxidantes en el plan de alimentación

Sobre los antioxidantes hay que mencionar que son un tipo de sustancia que va a suponer una protección ante la creación de los radicales libres y la oxidación. Para que lo tenga en cuenta, se van a encontrar con mayor facilidad y en más cantidad en las frutas y verduras, resaltando que, por sus propiedades, son un muy buen método para prevenir el desarrollo de un sinfín de enfermedades, entre las que por supuesto se incluyen los de tipo cardiaco o el cáncer.

Por todo lo anterior, es siempre una muy buena idea que se asegure un consumo mínimo de verduras y frutas todos los días. Sin embargo, estas son sustancias que también se van a encontrar en especias o sustancias como el café. Con la inclusión de estos productos en una alimentación cotidiana se va a poder luchar contra el envejecimiento o prevenir enfermedades crónicas.