Mentiras y verdades sobre el consumo de azúcar

En las discusiones sobre alimentación saludable, no hay ningún tipo de duda que el azúcar se suele situar como uno de los puntos de discusión que más se mencionan. En ese orden de ideas, es fundamental que se descubran las mentiras principales que suelen circular sobre este producto, además de reconocer lo que la ciencia dice sobre ellas.


Para ir desenredando todo lo que tiene que ver con el debate nutricional alrededor del azúcar, en este artículo nos concentramos en indicar los aspectos más relevantes sobre la guerra que existe contra las grasas, en donde el azúcar es uno de los protagonistas principales de la literatura sobre nutrición. Tenga en cuenta que todos estos aspectos son importantes al momento de pedir Herbalife online para la elaboración de un plan de alimentación saludable y equilibrado.

¿Es necesario del azúcar para el cuerpo?

Una de las afirmaciones que más se utiliza en la publicidad es que el azúcar es necesario para el funcionamiento del cuerpo, particularmente cuando se presentan productos azucarados para el desayuno. Incluso, se puede pensar que una de las frases que más repiten son algo como “los alimentos ricos en azúcares son un combustible para empezar el día con la máxima energía”.

Lo interesante de esta situación, es que los expertos en salud y alimentación se inclinan por destacar que esta afirmación no es cierta. Además de lo anterior, no se han establecido unas cantidades mínimas sugeridos de azúcar, sino todo lo contrario. Desde la Organización Mundial de la Salud o la European Food Safety Authority e incluso el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, las instrucciones que se establezcan límites los cuales no se pueden superar.

Sobre el azúcar blanco, no presenta ningún valor nutricional y entre menos se consuma es mejor. En realidad, lo que las células necesitan es glucosa y está puede ser obtenida a través de distintos sustratos, donde los más habituales son los carbohidratos y no sólo el azúcar. De acuerdo con estas organizaciones, las fuentes ideales para acceder a estos carbohidratos son: los granos preferiblemente integrales, frutas, legumbres y tubérculos.

¿Es mejor el azúcar moreno que el azúcar blanco?

Es otra de las grandes mentiras que se han extendido por el mundo alrededor del azúcar. La explicación principal para esta afirmación es que el azúcar moreno, del mismo modo que otros azúcares naturales, aportan nutrientes y no sólo se encarga de endulzar la comida. Por tal motivo, puede llegar a considerarse que es una mejor opción cuando se elige un edulcorante todos los días.

Por otro lado, el azúcar moreno sufre de un procesamiento menor al azúcar blanco, por este motivo, logra conservar una cierta parte de la melaza que le da ese tono marrón tan característico. En cuanto a la melaza, ésta va a poseer ciertos nutrientes como minerales y vitaminas, aunque sus cantidades son poco relevantes desde una perspectiva nutricional, así que no es una fuente de nutrientes que valga la pena.

Por el contrario, hay que tener mucha cautela en la utilización del azúcar moreno para endulzar las comidas. El organismo va a reaccionar del mismo modo, pero con un nivel alto de consumo va a producir caries y obesidad, sin que importe que se trate de azúcar moreno o que se piense que es más saludable.

¿Son los edulcorantes artificiales inocuos?

Una de las consecuencias principales de la mala fama que se ha ido expandiendo por el mundo en torno al azúcar y cada uno de los productos azucarados, ha traído como consecuencia que crezca de manera exponencial la gama de productos sin azúcar o sin azúcares añadidos. De todas maneras, en la mayor parte de los casos, los anteriores son productos que se caracterizan por ser exageradamente dulces y por incorporar edulcorantes de todo tipo.

De esta manera, hay que pensar que los edulcorantes artificiales en la mayoría de los casos son bajos en calorías, pero van a seguir endulzando los productos alimenticios, lo que significa que van a ser más apetecibles y sabrosos. El dato importante, es que los efectos negativos de los edulcorantes artificiales están siendo investigados por la ciencia, pues incluso su utilización como mínimo, se cuestiona por su relación con varios problemas de salud.

De acuerdo con ciertos estudios científicos, estos productos se vinculan con la obesidad, síndrome metabólico y varias alteraciones de la microbiota intestinal. Asimismo, no es muy seguro que sean un método eficaz para ayudar a los diabéticos cuando se quiere controlar el nivel de azúcar en la sangre.

¿Es el azúcar adictivo?

Es una de las mentiras más recientes que se suele repetir tanto en los medios de comunicación, como en las conversaciones de las personas. En muy buena medida, las redes sociales se han encargado de expandir estas historias de personas que van contando sus experiencias al intentar disminuir el consumo de azúcar. Incluso, hay teorías en relación con la capacidad adictiva del azúcar.

Más allá de todo lo anterior, hay revisiones que se han hecho desde la literatura científica sobre la capacidad adictiva del azúcar, entre las cuales la conclusión de los autores es que no existe hasta la fecha información suficiente y convincente para hablar de un potencial adictivo del azúcar.

En realidad, los expertos en nutrición centran el problema de esta adicción no en el azúcar, sino los alimentos ultra procesados, teniendo en mente que son ricos en grasas, azúcares y sal. Cada uno de estos alimentos se forma para ser muy apetecible, además de buscar que la persona no pueda parar de comerlas.

El azúcar y la hiperactividad infantil

Son muchos los padres que desde el primer momento en que les es posible, empiezan a controlar el consumo de azúcar en sus hijos, considerando que así se puede tratar el efecto que puede tener el azúcar en el comportamiento de los más pequeños.

Es una situación muy común que en las fiestas infantiles, los niños vayan animándose cada vez más según se comen, en la mayor parte de los casos dulces, al tiempo que se juega con los amigos. En otras palabras, es bastante natural que pronto se establezca una relación causal entre el consumo de azúcar y este comportamiento tan animado.

Ahora bien, en lo que hay que centrarse, es en identificar que sólo se trata de un efecto excitante el azúcar, lo que conlleva a tener en mente que jugar, el cansancio o el ambiente de juego se desconocen como variables que generan este tipo de comportamiento.

La realidad de la literatura científica hasta la fecha, nos permite concluir que no hay evidencia para relacionar el azúcar con la hiperactividad en los niños que consumen este producto. De todas maneras, también hay autores que como parte de sus conclusiones sugieren que se deben realizar muchas más investigaciones en torno a un consumo elevado de azúcares añadidos de manera crónica.

Pese a todo lo anterior, son muchas más las razones para desaconsejar y al tiempo disminuir de manera sustancial el consumo de azúcar en los niños, hay que destacar sobre lo anterior, que muchos de los niños en la actualidad suelen superar la cantidad máxima que se recomienda para evitar diversos problemas de salud, entre los cuales se resalta la caries dental o la obesidad.